Desafíos y Oportunidades para la implementación de una estrategia Data Driven o basada en el uso de datos.

Autor: Mag. Nicolás Raffo Menoni
Nicoraffo74@gmail.com

Ilustración 1- Imagen con representaciones de una cultura Data Driven

Es un hecho que los datos mandan.    La realidad indica que los datos, transformados en información y luego en conocimiento ya son un insumo más de trabajo que no se puede omitir.

Usamos y existen datos para prácticamente todo.

Tomar decisiones basadas en datos y su disponibilidad en abundancia es una ventaja competitiva a la que todos quieren aspirar.

Hoy se tiene en abundancia datos propios y de terceros que están ahí, al alcance de la mano de quienes estén mejor preparados para explotar esta realidad.

El problema radica en que para poder sacarles un real provecho, se necesitan una serie de condicionantes que si no se tienen complican el panorama.

Esta situación ya he comentado varias veces en artículos anteriores que no se detendrá y que por el contrario seguirá aumentando en forma exponencial,

Nunca antes como en este momento, el hombre fue capaz de generar y sobre todo disponibilizar tantos datos.

Se estima que en el año 2023 se generaron 126 Zettabytes de datos a nivel global y que esa cifra superó a la de años anteriores y que es una cifra que será superada en los años venideros.

Para ejemplo, planteo el hecho de que las medidas de medición que se vienen utilizando para representar la cantidad de datos disponibles viene quedando obsoleta sucesivamente. Pasamos de Kilo, Mega, Giga, Tetra a los Pentabytes, ya vamos por los Zettabytes y luego hablaremos de Yottabytes que son magnitudes que representan cantidades que ni siquiera somos capaces de imaginar y menos de gestionar sin la ayuda de la tecnología.

Los datos se crean de manera intencional o incluso sin saberlo por diversos medios. Cuando uno hace un trámite, cuando sube una foto a sus perfiles sociales, cuando se comunica a través de una app o red social, cuando se realiza una búsqueda, cuando se comenta algo de algún conocido o desconocido, cuando compra o vende algo y de muchas maneras más que llevan a que en muchos casos no se tenga conciencia de la huella que se va dejando.

Por esa misma razón, las empresas y organizaciones deben ser capaces de gestionar esos datos que puedan serles de interés y utilidad. Datos que pueden ser propios o datos que pueden ser adquiridos y aportados por terceros.

Para estar preparados a esta realidad, será necesario contar con ciertas precauciones y poder resolver necesidades puntuales que se nos presentarán.

A modo de ayuda y reflexión planteo o listo algunas de ellas:

1. Infraestructura necesaria para poder utilizar los datos.
2. Definir objetivos claros de para qué se sube la organización a ese tren del manejo y gestión de datos.
3. Diseñar una estrategia que sea lo suficientemente flexible y adaptable.
4. Inversión inicial para adquirir las herramientas necesarias y presupuesto posterior para poder garantizar su sostenibilidad en el tiempo.
5. Que la incorporación tecnológica que se haga sea escalable y adaptable frente a los nuevos avances que vengan.
6. Capacitación de las personas y actualización permanente para adaptarse a los constantes cambios y evolución.
7. Ser capaces de recopilar datos de interés y poder descartar aquellos que no lo sea.
8. Tener capacidad para integrar diferentes tipos de datos.
9. Generar una cultura organizacional que se acople a los cambios permanentes que se vienen dando.
10. Tener marcos éticos y legales claros para poder abordar una realidad que nos ha sobrepasado por su velocidad de avance.
11. Poder hacer un uso transparente y fiable de esa información, ya que se manejará mucha información sensible sobre muchas personas y organizaciones.
12. Tener un feedback y una evaluación permanente para poder saber cómo se viene avanzando o no y qué cosas deben sostenerse y cuáles cambiarse.
13. Establecer indicadores y KPIs claves, útiles y claros para poder ayudar a la necesaria evaluación que deberá hacerse en forma permanente.
14. Nutrirse y estar atentos a las experiencias de otros para poder anticipar, prever e imitar aquellas buenas prácticas y descartar las malas.
15. Mantener un espíritu crítico permanente para poder sostener el proceso que se inicie.

1. Poder compartir de manera clara y transparente los datos que se quieran visibilizar.
2. Tratar de generar sinergias de cooperación y coordinación con otras organizaciones para poder establecer un mayor y mejor “Know How” sobre el tema.

Sin dudas podrían aparecer en el listado otros puntos más, pero para plantear un punto de inicio creo que los expuestos sirven para generar un buen precedente.

También no debería de pasar desapercibido que esa carrera exige grandes disponibilidades de recursos de todo tipo pero en particular de los económicos. Ante esa realidad las Mipymes que son la mayor cantidad en el tejido de cualquier país a nivel global, son las primeras que están más comprometidas y ese es un punto que los estados no deberían descuidar.

El generar políticas de incentivo, soporte y desarrollo de estas infraestructuras datadriven o de manejo de datos es una actividad que no se debe descuidar y que además se debe encarar para generar un ecosistema de innovación y desarrollo de esta nueva cultura.

Hay que poner encima de la mesa el ser reactivos ante la realidad o por el contrario ser proactivos y generar y preparar las condiciones para poder estar.

¿Y el Turismo qué?

Si lo llevamos al ámbito del Turismo, veremos que hay un montón de aplicaciones y utilidades que se pueden utilizar en beneficio de las organizaciones y de los destinos que lo apliquen.

Si tenemos la posibilidad de recopilar y utilizar datos que puedan ser útiles para la gestión, debemos preguntarnos:

¿Cuáles son las oportunidades o las actividades que se podrían favorecer de una correcta política en el uso de datos?

Para responder esa pregunta apelaré también a un listado que permita sintetizar y visibilizar mejor esas oportunidades:

1. Se pueden detectar desviaciones de los objetivos previstos.
2. Se pueden realizar mapeos de calor sobre cómo se mueven los turistas o los clientes.
3. Se pueden segmentar los públicos y turistas que se reciben y los que no, para poder ver comportamientos más específicos.
4. Se pueden detallar patrones de comportamiento que ayuden a generar mejores soluciones y propuestas.
5. Se puede personalizar las experiencias según los gustos y necesidades de cada cliente.
6. Se pueden evaluar los resultados en forma permanente.
7. Se pueden realizar sugerencias de propuestas e incluso redirigir a los flujos de personas hacia donde se vislumbre como más viable y necesario.
8. Se facilita la gestión y la gobernanza de las organizaciones y de os destinos.
9. Se puede desestacionalizar la oferta o por el contrario reforzar los servicios en los momentos que sean necesarios.
10. Se puede mejorar la seguridad.
11. Se puede incidir y prever la movilidad en los destinos.
12. Se puede monitorear en tiempo real el transporte, la seguridad, etc.
13. Se pueden generar sinergias y cooperación entre los diferentes actores de la cadena de valor del destino en base a información precisa y real.
14. Se pueden planificar mejor las experiencias.
15. Se podría desarrollar un Turismo más sostenible a partir de la evaluación de los impactos actuales que se estén generando por el desarrollo de la actividad y de una posible intervención de mejora.
16. Se puede facilitar el desarrollo de un turismo más accesible, personalizando servicios u ofertas, identificando barreras que se puedan presentar, diseñando propuestas más inclusivas, recopilando información sobre lo que se está ofreciendo y qué resultados se están obteniendo,
17. Se podría analizar el impacto o no que se está logrando con la comunicación actual que realiza el destino.
18. A partir del punteo anterior se puede también desarrollar tecnologías que puedan asistir a las personas.
19. Se pueden detectar oportunidades y necesidades de capacitación y concientización para el personal en materia de accesibilidad, sostenibilidad, buenas prácticas, atención al cliente y mucho más.
20. Se pueden aplicar estrategias de optimización y revenue de precios en base a la información disponible.
21. Y muchas acciones más que se les puedan ocurrir.

¿Qué pasa en Latinoamérica?

Nuestra región también tendrá sus oportunidades y desafíos, pero lo que debería de quedar claro es que no puede quedar por fuera de esta realidad.

Somos una región con diversidad de mercados, de culturas y de sociedades, donde si bien el desarrollo de la innovación tecnológica puede venir más lento de lo deseado y con avances de manera desigual, también es real que hay un crecimiento en el acceso a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TICs) que podrían facilitar este desarrollo de una cultura de manejo de datos.

Para que ello suceda habrá que generar las condiciones necesarias y en ese rol los estados deben jugar un papel fundamental para generar condiciones, facilitar el acceso a las infraestructuras, capacitar a la población para que puedan interactuar con las nuevas tecnologías y posibilidades, pero por sobre todas las cosas generar marcos éticos y legales que permitan poder generar apuestas que sean seguras, viables y sostenibles.

Los marcos regulatorios deben ser una condición de base para un tren que generalmente avanza más rápido que lo que lo pueden hacer los gobiernos y nuestras sociedades.

Las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes).

No puedo omitir una consideración particular para este tipo de organizaciones que conforman más del 90% del entramado de todos los sectores a los que se quieran hacer alusión y en particular dentro de la actividad turística.

Las empresas más pequeñas, si bien pueden ser más ágiles a la hora de tomar e implementar decisiones, generalmente es un hecho que disponen de menos recursos. Recursos humanos, materiales y sobre todo de los económicos.

Son el sustento de millones de personas en nuestra región, por lo cual son un sector que no se puede omitir y que merecen una consideración particular.

Por esta realidad, es que si bien habrá oportunidades para sumarse a una cultura que priorice el manejo de datos, también habrá desafíos a sortear.

Es un hecho que podrán favorecerse del uso de tecnologías de acceso gratuito, que puedan resolver necesidades puntuales y que no requieran de gran inversión.

Deberán realizar una planificación en automatización de procesos, la cual en muchos casos no necesariamente significará un costo o una inversión, ya que hay soluciones que son gratuitas o al menos bastante accesibles en precio.

Será primordial que puedan establecer qué datos querrán y cuáles podrán utilizar para poder aplicar estrategias más eficientes y viables.

Y deberán apelar al uso de los canales directos que tienen con sus clientes para poder obtener un feedback directo y permanente para saber qué cosas están haciendo bien y cuáles no y en base a eso generar acciones concretas para sostener y/o para corregir lo que sea necesario.

Sin duda alguna deberán capacitarse en el uso y manejo de estas nuevas tecnologías.

El asociacionismo y la cooperación les brindará mejores oportunidades que si quieren jugar el partido de manera individual y es por ello que los clusters, organizaciones, Asociaciones y gremiales colectivas podrán ser un paraguas del cual valerse.

Deberán ser mucho más ágiles para poder aplicar el ensayo y el error, siendo conscientes de que tienen menos margen para fallar.

El Rol de los estados:

El rol de los estados en este aspecto es el de generar condiciones para que las mipymes se puedan sumar a una cultura data driven.

Algunas de las acciones que pueden implementar los estados pasan por:

• Generar las condiciones para que las mipymes puedan capacitarse.
• Brindar oportunidades de subsidios, préstamos blandos y financiación para favorecer a un sector que lo necesita y que es de vital importancia para la economía.
• Apelar a exoneraciones fiscales para un sector que lo necesita.
• Actuar como inversores para realizar los avances que se necesitan y que la economía sin su apoyo no está pudiendo realizar.               Los estados en muchas oportunidades terminan siendo los grandes inversores, en el marco de una estrategia definida a nivel país y con objetivos y pasos claros a implementar.
• Implementar plataformas de datos abiertos para que las mipymes puedan recurrir a esa información que le es vital y sensible y que en muchos casos no la puede obtener por sus propios medios.
• Fomentar ecosistemas innovadores que puedan aportar más conocimientos y fuerza al desarrollo de la competitividad de sus empresas, que en definitiva redundará en una mayor competitividad a nivel país.
• Facilitar asesoramiento técnico para orientar y realizar mejores implementaciones.
• Facilitar la promoción y difusión de esas iniciativas locales y que inciden directamente en un mayor y mejor desarrollo.
• Establecer las regulaciones y normativas pertinentes, que es un rol que les compete directamente.

En definitiva, todo lo que se menciona precedentemente, no es más que generar y establecer condiciones y reglas claras de juego para que las mipymes se puedan sumar a una estrategia que redundará en beneficio de toda la sociedad.

No hay un único tren disponible, tampoco una única estación a la cual llegar, pero lo que si debería de quedar claro es cuál tren se quiere tomar y hacia dónde se quiere ir.

Si eso no se piensa y planifica de antemano, tomen cualquier tren. Seguramente los llevará a algún destino, posiblemente no el que desearían, ni tampoco el que les brinde mejores condiciones y oportunidades.

Las opciones están a la vista y a la mano.   Diagnosticar, Prepararse, Decidir, Evaluar y Avanzar es el camino y los pasos a implementar.

Como siempre a la orden para intercambiar opciones y visiones.

Mag. Nicolás Raffo Menoni

Nota

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